Geraldine Caballero es la encargada de dar vida a hermosas piezas de joyería hechas de alambre en baño de oro y plata, piedras, perlas, cristales, mostacillas, hilos y más. Sus piezas, que distribuye en bazares, mercaditos y a través de redes sociales, le permiten sostenerse económicamente y soñar con lograr un día convertirse en empresaria.
Facebook: @gerycollection.sv
Instragram: gerycollection.sv
Geraldine Caballero ha experimentado desde niña con piedras y cuentas, siempre le gustó combinar mostacillas de colores y elaborar pulseras, collares y más. Ya en bachillerato las comercializaba de manera informal para tener algún ingreso extra.
Más tarde ese gusto por la joyería artesanal le permitiría sostenerse económicamente, ya que perdió su empleo formal, y en una mezcla de pasión y necesidad, se concentró en perfeccionar las técnicas y lograr piezas con un estilo único y sofisticado.
Hoy posee un catálogo de más de 300 piezas distintas- ninguna es igual a otra- asegura, y siempre está creando accesorios nuevos que postea a diario en sus redes sociales, su principal canal de venta.
Sus accesorios más demandados son los aretes hechos en alambre laminado de oro o de plata, que ella combina con piedras de los colores de temporada, aunque, insiste, siempre presta atención a los comentarios de sus clientes para ofrecer lo que ellos están buscando.
Madre soltera de Diego de 14 años, ya involucra a su hijo en el emprendimiento y juntos están planeando lanzar una línea de pulseras de caballero, porque quiere que él aprenda a ganar dinero por sí solo.
De pasatiempo a negocio propio
Geraldine que se graduó de Mercadeo en una universidad privada y es bilingüe, dice que empezó con su emprendimiento Gery Collections, casi como un hobbie pero en 2018 al quedarse desempleada invirtió todo el dinero que tenía en algo que asegura le apasionaba y estaba segura que le podría dar ingresos.
Y es que, para la joven emprendedora, antes de lanzarse a montar un negocio, la persona debe primero analizar cuáles son sus habilidades, apostar por ellas y luego, por supuesto, estudiar el mercado y ser perseverante.
En 2018, cuando oficialmente lanzó la marca, asegura que ya contaba con clientes que conocían su producto, pero decidida a crecer, se concentró en aprender nuevas técnicas y es lo que sigue haciendo hasta hoy.
“Cuando yo empecé no había tantos emprendimientos como ahora, con la pandemia y tanta gente que perdió el empleo se han disparado, y más de joyería, pero la clave es siempre ofrecer productos de calidad, tener suficiente stock y sobre todo ser persistente”, cuenta Geraldine.
La emprendedora destaca el apoyo de sus padres que ha sido clave para que ella pueda seguir creciendo “Mi papá me ha hecho los muebles para exhibir mi joyería y mi mamá me acompaña en los mercaditos y me aporta ideas, ellos siempre me han apoyado e impulsado a no rendirme”, cuenta.
Geraldine consiguió hace casi un año un empleo formal en el área de compras y aunque ya tiene ingresos fijos, combina su tiempo entre el trabajo y su rol de emprendedora, porque la empresa donde labora es flexible y le apasiona lo que hace.
“Son tiempos difíciles y ya no quiero dejar esto, la joyería en alambrismo no tiene límites, yo pruebo combinar colores, estilos y tamaños con las mismas piezas y sale algo distinto cada vez, salen a prueba y error, cosas maravillosas”, detalla la joven madre.
Geraldine sueña con montar su tienda física, “ojalá en un centro comercial de gran afluencia”, señala. Por ello se esfuerza a diario por mantener a flote a Gery Collections, en busca de alcanzar su meta.
“Cuando se es emprendedor hay muchas cosas que sostienen el negocio, y una de ellas es tener un objetivo, yo lo tengo claro: quiero un lugar físico y para lograrlo tengo que ser persistente, yo trabajo desde las nueve de la noche hasta la madrugada, sacrificio fines de semana, pero estoy orgullosa porque voy tras mis metas y quiero alcanzarlas”, concluye convencida.