La palabra Shakti, significa energía, pero para muchas mujeres en El Salvador, ha significado oportunidades y empoderamiento.
Más de 700 mujeres de zonas rurales del país han encontrado una alternativa de generación de ingresos para ellas y sus familias; y una forma de contribuir al desarrollo de sus comunidades, gracias al modelo de distribución inclusiva de Unilever llamado Shakti.
Dicho modelo funciona a través de la creación de redes de mujeres, brindándoles capacitación en negocios y acceso a una actividad comercial, al distribuir y comercializar productos Unilever.
Shakti fue implementado en El Salvador por primera vez en el año 2016 mediante una alianza con FUSAI, y con el respaldo del BID Lab y el Fondo Japonés. Opera de manera activa en más de ocho departamentos del país, entre estos: La Libertad, San Vicente, Usulután, Ahuachapán, Chalatengo, Sonsonate, La Paz, Cabañas y Cuscatlán.
“Unilever cuenta dentro de su estrategia comercial con un Plan de Vida Sostenible, como parte del plan nace Shakti, con el fin de mejorar la calidad de vida de las comunidades, promoviendo la equidad laboral, los negocios inclusivos y la mejora de oportunidades e igualdad para las mujeres”, explicó Marina Rodriguez, Gerente de Asuntos Corporativos y Sostenibilidad de Unilever para Centroamérica.
Las emprendedoras Shakti pueden ganar hasta un 25% de margen de ingreso vendiendo los mejores productos de Unilever de sus categorías de alimentos, cuidado personal y cuidado del hogar.
“Shakti impacta a un promedio de entre 7 y 10 personas inscritas en la red, lo que nos ha permitido a la fecha, impactar de forma positiva a más de 5.000 personas”, agregó Rodríguez.